Si eres el orgulloso propietario de una mascota, antes o después tendrás que verte en la situación de necesitar ayuda médica para tu pequeño, ya sea por una cuestión rutinaria o porque tu amigo padezca alguna enfermedad. A la hora de escoger un buen veterinario, hay que tener en cuenta diversas cuestiones, así que toma nota de cómo escoger una clínica veterinaria teniendo una mascota.

Consejos para elegir un buen veterinario

El primero de los consejos para elegir un buen veterinario es que no te quedes con la primera opción que encuentres. Siempre debes buscar información al respecto y comparar precios, servicios y opiniones para tomar la mejor decisión, así que hazlo con tiempo para que una emergencia no te pille de improviso.

Tipo de mascota

Parece lógico, pero no todos los veterinarios tienen personal cualificado para atender a todas las mascotas. La mayoría ofrecen servicios para perros y gatos, pero la cosa se complica si compartes tu vida con un animal exótico. Por eso, antes de nada, asegúrate de que el veterinario tiene los conocimientos necesarios para atender a tu mascota.

Localización del veterinario

Cuanto más cerca de tu casa, mejor. Esto no quiere decir que lleves a tu mascota a un veterinario de dudosa calidad solo porque esté cerca, pero sí se recomienda que en tu decisión valores la cercanía, porque existen algunos problemas o enfermedades que pueden tener un resultado distinto dependiendo la velocidad con que se traten.

Referencias del veterinario

La gran mayoría de clientes de un veterinario serán los propios vecinos del barrio. Por eso, una buena estrategia para conocer el lugar es preguntar a los vecinos con mascotas, aunque también puedes buscar opiniones por internet, algo muy fácil de hacer hoy en día. Posiblemente encontrarás alguna opinión negativa, pero si en conjunto son muchas más las positivas, entonces puedes confiar en el lugar.

Instalaciones y servicios

Otro punto a valorar es el de las instalaciones y los servicios con los que cuenta. Para eso, lo mejor es que acudas personalmente al lugar, observes el espacio y también el trato con los clientes. Un lugar limpio y espacioso siempre es una buena opción, aunque debe complementarse con un buen trato.

Horarios y modo de contacto

También es importante que el horario sea amplio, mejor aún si tiene servicio de urgencias, y que el modo de contacto sea rápido y sencillo en cualquier momento, porque eso facilitará que tu mascota se recupere ante cualquier eventualidad. Por ejemplo, es aconsejable que puedas pedir cita por internet, algo que podrás hacer si la clínica cuenta con un software veterinario adecuado.

Personal

Por último, pero no menos importante, debes tratar directamente con el personal veterinario, para comprobar qué parte de su trabajo es el amor por los animales. Apuesta siempre por las personas que empaticen y que ven en las mascotas algo más que un paciente, porque serán los que más luchen por curarlos.

Ya sabes cómo escoger una clínica veterinaria teniendo una mascota. Valora todos los lugares que puedas antes de tomar una decisión, porque tu mascota te lo agradecerá.